Tu y yo después del invierno de Laia Soler — Reseña

Francamente, no pensaba hacer esta reseña. Porque contrario a lo que se puedan pensar, no me gusta hacer reviews haters. La cosa es que me mandaron este libro justamente para eso. Así que bueno, aquí va mi opinión totalmente honesta de esta historia. 

Y antes de que me tiren hate por esta Review les digo que si su bello corazón amó este libro locamente con locura mejor ni le sigan, porque ya les adelanto que no les va a gustar. Hay miles de reseñas dándole gran puntuación a este libro y son libres de ir a leerlas. 💁‍♀️

Aclaro que esta es una opinión totalmente mía y como tal, voy a soltar spoilers porque en estos libros es inevitable no hacerlo. La verdad no conocía de nada a esta autora, había escuchado críticas increíbles sobre sus libros y por eso es que me animé a leerlo y tenía tanto hype en la cabeza. Para mí fue una decepción, pero eso no significa que para ti también lo sea. Tampoco tengo nada contra la autora así que no se hagan ideas. La review va con un poco de sarcasmo y respeto claro está.🤗

Sinopsis

Qué fácil sería la vida si el amor fuera luminoso y eterno, como prometen los cuentos de hadas. Pero algunos amores aparecen poblados de abismos e incluso tienen fecha de caducidad. Y entonces no hay más remedio que saltar… o salir huyendo.
Desde que regresó a Valira, la ciudad de montaña que la vio crecer, Erin lleva una existencia tranquila y predecible junto a su novio Bruno, un chico ideal, y a sus amigos de toda la vida. En ese mundo que tan bien conoce, Erin consigue mantener a raya la oscuridad que desde la infancia acecha su alma. En Valira, cuenta con un arma secreta: el haya mágica de su jardín, que desde siempre ha guiado todas sus decisiones. Las primeras nieves, sin embargo, traen consigo nuevas caras y encuentros a la pequeña ciudad de esquí. El invierno lo cubre todo de blanco y de frío… todo, salvo el corazón de Erin, cuyos hielos empiezan a derretirse. Puede refugiarse en la magia del árbol una vez más… o explorar las sombras de su corazón, un territorio incierto y extraño, que nadie salvo ella misma puede conquistar. Laia Soler, la autora que nos hizo vibrar con Nosotros después de las doce, nos transporta de nuevo a los infinitos paisajes de Valira en un relato turbador, pero también resplandeciente sobre el miedo, el riesgo y la magia del presente. 

| Mis impresiones |

La historia

Ya nada más comenzar la historia este libro empieza a ir cuesta abajo. Eeeeeen serio. Porque bueno, nos han vendido este como un "Romance Contemporáneo" o cuando menos un "New adult".

Pues bien, corríjanme si estoy mal, pero ¿Porque no aclaran que tiene magia y fantasía? Porque bueno, yo aquí no esperaba encontrarme carruseles mágicos ni árboles que hablan. Sino una bonita y EMOCIONAL historia de amor que brilló por su ausencia. 

A mí no me gustó todo eso de que ella hablara con un árbol y dejara que el decidiera por ella. (Todo es muy onda Pocahontas eh). A cada rato me imaginaba esas escenas y más que incredulidad me daban risa de lo absurdo.

Los personajes

Creo que aquí está el error principal para mí. Sus protagonistas. Porque conocemos a una Erin insoportable. No hay otra palabra para describir a esta chica. Qué si, que está enferma. El problema es que la autora no profundiza sobre su enfermedad. Nos las pasamos la mayor parte del libro sin saber que tiene ni que tuvo. No hay aclaraciones ni situaciones emocionales ni desgarradoras como se esperaría si una persona sufre de problemas de depresión y ansiedad. Según yo eso tenía, pero bueee... no está propiamente dicho así que who knows? 🤷‍♀️

Este tipo de enfermedades son graves y la autora, a mi modo de ver; no sabe transmitir la situación de una manera real y trascendente. Erin es insegura, inmadura, aniñada, indecisa hasta decir basta. Infumable. Y por si no fuera eso demasiado. La chica cómete el peor pecado que pueda cometer un protagonista en un libro (para mí) ES INFIEL. 

Ah pues así pero al revés...

Pero ahí no acaba la cosa, no es de esas "Ya lo hice, ya lo bailado quién me lo quita..." NOOOO. Mucho peor. Es de esas que lo hacen y luego de arrepentirse y llorar a mares, lo vuelven a hacer. 

Literal fue un constante —Te beso- Ay que tonta, me cargué mi relación, no podemos volver a hacerlo- Bésame como si no hubiera mañana—

I MEAN. QUE SE DECIDA DE UNA VEZ!!!!!

Además, se la pasa todo el libro auto agrediéndose. Que si su cabeza no funciona. Que si está loca. Que si la vida no vale nada. Y shalala. Me quedó claro desde el principio.😒 Con sus tonterías, no necesitaba recordármelo a cada rato.😓😪🤐

Una y otra vez busca consuelo en la vida que tiene y más indecisa no puede ser. Tanto así que hasta deja que su dichoso árbol mágico hable y decida por ella. Ammmm ¿hola? ¿Un árbol que habla? Creo que con eso queda bastante claro que ella no está bien de la cabeza. Y no me malentiendan. Que es hermoso creer en la magia. Pero aquí está metida demasiado a fuerzas. No hay motivo ni razón para este tipo de situaciones, pero de todas formas las hay.

Todas las acciones de la protagonista son taaaan tontas. ¿Cómo así que se besa con uno y al rato se arrepiente de ponerle los cuernos al novio? ¿¡Pero ni dos segundos después lo vuelve a hacer!? Vale que eso es normal y pasa. Pero digo yo, lo más ético y moral sería terminar una relación y luego empezar otra. Y si ya lo hiciste pues bueno chica, ¡disfrútalo, DATE! pero ¿para que lloras y te arrepientes si segundos después vuelves a lo mismo? No es COHERENTE.

Y de falta de coherencia aquí hay mucho.

No entiendo, si se la pasa diciendo que está enferma y mal de la cabeza ¿Porque dejó de ir al psicólogo? O si dice que su vida es una vida feliz y genial ¿después resulta que su vida casi casi era un asco? y ¿que pasa con su súper amor por Bruno? Ya luego lo deja de amar claro, o mejor... nunca lo amó. No. NO Y NO.🙄🙄🙄

—No he dicho que me veas perfecta, Bruno. Pero me tratas como si lo fuera. Nunca te enfadas…
—Ahora estoy enfadado.
—Casi nunca te enfadas —rectifico—, siempre me dices que sí a todo, estás encima de mí como si de un momento a otro fuera a romperme.

Yo quiero un hombre que me diga que sí a todo!!!!

Hablando de Max y Bruno... Son unos personajes sumamente superfluos. No hay trasfondo en su personalidad. No me pareció que estuvieran bien trazados ni humanizados. Era más bien que solo estaban por estar. Max tenía potencial, pero terminó siendo nada. Al final fue más cobarde que yo cuando veo una araña. Sus acciones y actitudes no terminé de comprenderlas. No enamora ni entusiasma. NO NADA. 

¡¡¡Hoy no chata!!!

Bruno solo tuvo una escena sobresaliente en el libro y fue de hecho la que más me gustó. Porque su reclamo señores, es EL RECLAMO. La autora había pintado un halo de felicidad en esta pareja que era un espejismo pero que también era cómodo y es quizás lo que quiso mostrar. El miedo a lo desconocido, la costumbre en las relaciones, la zona de confort y la idealización del amor.

Mi problema es que lo hace todo TODO de forma superficial. No se tocan los problemas mentales de los protagonistas. No se toca a fondo el tema de la infidelidad. No hay coherencia entre acciones y palabras y mucho menos hay una narrativa atrayente y adictiva.

Más bien fue una narrativa sumamente repetitiva y simplona que en lugar de llenarme con su magia me llenaba de aburrimiento. Sorry, pero así lo sentí. No tengo nada contra la autora. Ni la conozco, pero su pluma me quedó debiendo. Literalmente hubo algunas partes que me tenían más aburrida que spider man en el desierto. 

A ti querido lector: 

La historia no tiene final cerrado. Lo más que puedes aspirar a conocer es lo narrado por la reina de las hadas (creo que si era ella la narradora pero ya no me acuerdo jajaja) que ve el futuro y muchas cosas más. Wuuuuuu 🙃 En fin, que creo que me extendí demasiado. Obviamente no recomiendo este libro y dudo mucho darle una oportunidad a la autora nuevamente.😆😅

Lo bueno es que no fui la única que no pudo tolerar este libro. Si quieren leer la reseña de Luis (que lo fuimos leyendo igual, yo más en diagonal que él) aquí la tienen.​